Las baterías de condensadores compensan la energía reactiva demandada de la red de alimentación y, por tanto, mejoran el rendimiento útil de la instalación incrementando también la vida útil de los equipos.
La elección entre una y otra dependerá del tipo de equipo a compensar. La compensación automática
tiene como misión chequear constantemente las necesidades de compensación de la instalación para
actuar en consecuencia. Cuando la batería está funcionando y dependiendo de las necesidades, el
microprocesador regula la entrada de los diferentes escalones.
Todos los equipos disponen de su protección acorde a la potencia y están preparados para una
configuración modular que permite su ampliación en función de las necesidades futuras de la instalación.